Un álbum catártico, emocional y lleno de pop que marca el proyecto más personal de su carrera
AITANA deja atrás todo filtro para mostrarse más real, vulnerable y poderosa que nunca en CUARTO AZUL, su nuevo álbum de estudio. Con 19 canciones, colaboraciones de alto calibre y una narrativa emocional profunda, este disco no solo representa una evolución artística es un renacer personal.
Bienvenidos al cuarto donde Aitana vuelve a ser ella
“Cuarto Azul” no es solo un título: es un espacio emocional. Es ese lugar simbólico donde Aitana se permite sentirlo todo, sin máscaras. Tristeza, rabia, nostalgia, amor y esperanza conviven en este disco que funciona como diario íntimo y refugio al mismo tiempo. Cada canción es una etapa del proceso de sanar. Desde “6 DE FEBRERO” hasta “CUANDO HABLES CON ÉL”, el viaje se siente honesto, crudo y profundamente humano.
Una montaña rusa emocional con sonido pop y corazón global
A nivel musical, Aitana lleva el pop a nuevas dimensiones, fusionando sonidos de las últimas décadas pero siempre manteniéndose fiel a su esencia. En el tracklist aparecen joyas como “SEGUNDO INTENTO”, “SUPERESTRELLA”, “SENTIMIENTO NATURAL” (junto a Myke Towers), y colaboraciones con Kenia OS, Jay Wheeler, Alaska, Ela Taubert, Danny Ocean y Barry B.
Una Listening Party que rompió moldes
Antes del lanzamiento, miles de fans vivieron el álbum en exclusiva en una Listening Party inmersiva celebrada en el Movistar Arena de Madrid. Un evento pionero en España, con proyecciones 360, contenido exclusivo y la presencia de Aitana, quien compartió cada detalle del proceso creativo.
“Cuando hables con él”: la herida hecha arte
Junto al lanzamiento del disco, Aitana estrenó el video de “CUANDO HABLES CON ÉL”, una de las canciones más dolorosamente honestas de todo el álbum. En él, la vemos cuidar a sus versiones más jóvenes mientras su cuarto ese espacio de recuerdos y emociones se consume en llamas. Una metáfora visual tan potente como conmovedora.
Cuarto Azul es más que un disco: es un manifiesto emocional
Con este álbum, Aitana no solo consolida su estatus como figura del pop, también se consagra como una artista que no teme mostrarse humana, frágil y fuerte al mismo tiempo. “CUARTO AZUL” es un lugar al que todos, en algún momento, vamos a querer regresar.
