Cada siete de septiembre recordamos un clásico de la música en español, aquella que fue interpretada una y otra vez por Mecano, infaltable en el repertorio de la banda, considerada como una de las piezas más importantes en su carrera musical. Es precisamente “El 7 de septiembre”, canción lanzada en 1991, compuesta por Nacho Cano; es parte del álbum Aidalai.
La canción nos narra una historia de amor y tristeza a la vez, por una pareja que continúa celebrando su aniversario a pesar de su rompimiento. Está canción está basada en una historia real, precisamente en la historia de Nacho Cano, quien dedicó el tema a Coloma Fernández, su pareja desde 1981 hasta 1989, y a quien no solamente me compuso una canción, pues La fuerza del destino también evoca su amor.
Parece que El siete de septiembre es el desenlace de la historia de un amor que nos trajo frases como: “y aunque empeñados en soplar, hay llamas que ni con el mar”.
Nacho conoció a Coloma cuando ella tenía 19 años, como dice aquella canción. Además también salían de fiesta al Golden Village, aquel “bar del oro”. Era una relación con mucha intensidad, pasión y fuerza, que después de separarse por el ajetreado ritmo de la banda, Nacho y Coloma seguían viéndose cada siete de septiembre durante ocho años. Aunque tenían su vida por separado, ese día era un ritual. Se veían en “La Parra”, un restaurante donde precisamente amarraban sus manos bajo la mesita que los vio revivir su amor cada siete de septiembre.
Es por eso que la canción no es una historia de amor completamente, es más un recordatorio de la intensidad del amor que no puede olvidarse.
“Y aunque la historia se acabó, hay algo vivo en este amor “… Y continuará vivo hasta que la canción siga siendo un clásico que no podemos olvidar.